Para ambientes minimalistas queda muy bien un tapete que sea de tonalidad pura, el cual use tonos similares a un mueble del lugar como puede ser un sofá, sillones, una lámpara, etcétera, aunque también puede tratarse de un tono de contraste perfecto. Para casas más clásicas se puede optar por los clásicos tapetes de diseño, aunque claro, tengamos en cuenta que estos mismos no deben desentonar con el resto de muebles de la habitación, y siendo la madera uno de los materiales más comunes en los hogares, sería bueno optar por una alfombra que mantenga tonalidades cálidas que se complementen a la perfección.
Fuente: blogicasa.com
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